jueves, 24 de febrero de 2011

Santiago de Chile (17/1/2011)

  
Vistas desde casa de Jorge

Santiago de Chile….tanto por descubrir y tan poco tiempo para recorrer. Esta fue la sensación con la que nos quedamos de la capital de Chile, pero paso a paso.

Habíamos llegado a Santiago a la 1 de la mañana, y como todo buen viajero sabe que en las capitales los taxistas te intentan engañar. Por lo tanto ya nos veis a nosotros dos respondiendo las preguntas del taxista con toda naturalidad, comentándole que no era la primera vez que estábamos en Santiago,…. Y preguntándole por las calles que se veían muy diferentes de noche ya que íbamos a casa de Jorge, nuestro amigo Santiaguino que habíamos visitado muchas veces…. Jajajaja Unas mentiras piadosas que hicieron que llegáramos bien y que no nos estafaran!! Truquillos de viajero .

Llegamos a casa de Jorge y nos recibió con los brazos abiertos a la 1,30h de la mañana. Jorge es un anfitrión espectacular. Nos ofreció su casa, sus atenciones y salimos con él y con su vecina Jacquie a descubrir Santiago. Solamente os decimos que no conocemos demasiado de la arquitectura de Santiago, y no nos importa, pero de sus rincones y su ambiente de noche si, y todo gracias a Jorge.
  
Jorgue después de "La Piojera": Perdona Jorgue por la foto!!

Era el segundo día que estábamos en Santiago y Jorge nos llevó a un lugar peculiar llamado “La Piojera”. Si lo tuviéramos que describir diríamos que es un pequeño antro que todo Santiaguino debe conocer donde se va a beber y mucho. Se beben tragos de medio litro llamados “Terremotos” y después “Replicas”, y creo que sus nombres lo dicen todo. Salimos los cuatro; Jorge, Jacquie y nosotros medio mareados pero lo bueno es que nos fuimos a beber cervezas. No vamos a contar más pero hablamos mucho, nos reímos más y al día siguiente teníamos una resaca importante. Sin embargo la experiencia “La Piojera” fue única ya que hasta en otros países hablando con chilenos se alegraban de que hubiéramos conocido este lugar. Además lo más curioso es que estando bebiendo cervezas un chico nos tocó por detrás…. Y era Sebastien!!! El canadiense que habíamos perdido en Calafate el día de Navidad!! El mundo es demasiado pequeño.


Con Sebastien y con Jon, el vasco, quedamos al día siguiente en Santiago. Casualmente Jon también estaba en Santiago disfrutando de su viaje, así que como buen amigo (ya que la ultima vez lo habíamos visto en Fin de año en Bariloche, Argentina) quedamos y visitamos parte de la ciudad juntos. Santiago tiene una plaza de armas preciosa y muy bien preparada para sentarse y disfrutar de la vida callejera. Al lado de la plaza hay una parte llena de locales de comida donde comerte un lomito a lo pobre, unos completos o un pernil (cuidado que no es el mismo pernil que el nuestro!!). Caminamos por las calles y disfrutamos de los rincones de Santiago, que como bien dice Jorge es una ciudad llena de encantos, pero que hay que saber buscarlos.

Ami y Sara en la furgo en la Plaza de armas de Santiago, al lado Jon y Sara




Sara con "Cabezón" de isla de Pascua


Así que otro día más en Santiago nos permitió ver a Jon, a Sebastien, disfrutar de la ciudad y de la compañía de Jorge y Jacquie. En esta ciudad nos despedimos de toda esta gente y la verdad es que dejamos Chile con pena. Habíamos estado en casa de Jorge como reyes y nos dejamos a dos amigos en Santiago. Por otro lado Sebastien volvía a Canadá y Jon estaría perdido por Bolivia. Sin embargo, nos esperaba Perú y los caminantes teníamos que seguir caminando. Por eso esta entrada se la dedicamos a los que dejamos por el camino y a los que dejaríamos más adelante. Gracias!! 


Jon, Sebastien y Sara
Ami, Jon y Sebastien de despedida

jueves, 17 de febrero de 2011

Centro de Chile: Valparaíso y La Serena

Ya hace más de 15 días que estamos en Chile y nos hemos acostumbrado a su comida: cazuela de vacuno, los completos (hot dogs), al uso de la palta (aguacate),…

La suerte nos acompañó y desde Villarrica llegamos directamente a Valparaíso. En este tramo habíamos hecho buenos amigos como Manuel, un camionero Chileno con el que compartimos buenos momentos. Estábamos en el centro de Chile. Valparaíso está a una hora de la capital, Santiago de Chile. Valparaíso se conoce como la ciudad de las casas pintadas y la verdad es que esta ciudad tiene una arquitectura de casa de chapa pintadas de colores llamativos. También la libre expresión que reflejan los cientos de grafitis que hay en la ciudad y las cientos de escuelas de arte, vida callejera y oficios “bohemios” le dan un aire artístico a Valparaíso.

Esta ciudad está llena de empinadas cuestas, cerros y callejuelas. La gente te avisa que hay que ir con cuidado con los ladrones, ya que es una ciudad muy humilde donde algunos aprovechan que los turistas caminan por los museos de arte que hay al aire libre para sacar un sobresueldo. Nosotros caminamos con normalidad, disfrutamos de la ciudad y no pasó nada, pero siempre vale la pena estar prevenidos. A parte de eso nos agradó. También es una ciudad con un poco de desorden, pero disfrutamos del momento. Descansamos tres días en Valparaíso y de su vecina Viñas del Mar.

Al parece Viñas es una localidad casi pegada a Valparaíso donde la aristocracia de la época se construía las mansiones para alejarse en verano de Valparaíso. Todavía quedan grandes casas en Viñas del Mar y además su costa de arena atrae a más turistas, pero creemos que Valparaíso tiene más encanto ya que es más autentico.





Foto: jijiji Luchando con Pablo Neruda (tiene una casa en Valparaiso). Pintada callejera, otro tipo de expresion artistica

Fotos: Las calles y los coles de Valparaiso

Sara y Ami con Valparaiso de fondo
Las calles de Valparaiso

Presa de camino al Valle. Debajo hay varios poblados
A los días nos alojamos del centro de Chile para subir a La Serena. La Serena es una ciudad de costa con mucha cultura de marisco y de turismo de playa. De hecho muchos argentinos cruzan a esta localidad porque les resulta más cerca que ir a las costas de su país. Allí estuvimos un par de días en casa de un matrimonio mayor. Recorrimos caminando la costa desde el típico faro hasta que decidimos conocer El Valle del Elqui y nos marchamos.

Este rincón en el que dicen que se avistan ovnis (quizá porque es zona de vinos y de gente un poco “hippie”) va desde La Serena hasta llegar a Pisco Elqui. Se pasan por muchos pueblitos, concentrados alrededor de la carretera que cruza el valle, de apenas algunos habitantes como Monte Grande , Vicuña y Pahiuano. Llegamos a Pisco Elqui con nuestra mochila rehecha (porque las grandes las habíamos dejado en el guardarropa de la terminal de La Serena) y la tienda de acampar con la idea de pasar un fin de semana diferente durmiendo al lado del rio.
Cuando llegamos nos decepcionamos, hasta los campings eran caros, así que preguntamos a unos artesanos. La suerte hizo que una de ellas, de unos 50 años, tuviera una hija que había estudiado en España, así que nos dijo que iba a llamar a una amiga pero que teníamos que hacernos pasar por amigos españoles de su hija. Nosotros seguimos el juego y al final acabamos en la propiedad de esta señora amiga de la artesana. Pero no os lo perdáis que la señora tenía una finca de viñedos enorme y al final una playa privada con salida al rio (zona privada) en el que nos dejó acampara libremente…flipamos!!!! No quisimos abusar y al día siguiente nos fuimos y fuimos a Vicuña a un camping. Estaban de fiestas en el pueblo, así que fuimos de verbena.

Fotos: El terreno de la señora que nos abrio las puertas de su finca

Sitio de acampada en la propiedad privada



Fotos: Sara y un vino del Elqui. Derecha: Torre de Vicuña, un pueblo del Valle

Cielo estrellado del Valle del Elqui

Volvimos a La Serena para recoger el equipaje y viajar a Santiago de Chile ya que Jorge, un chileno que nos alojó en la capital, nos estaba esperando.











 

domingo, 13 de febrero de 2011

Entramos a Chile: Osorno, Valdivia, Villarrica y Pucón


Entramos en Chile. Estamos a enero de 2011 y después de pasar casi mes y medio en Argentina y disfrutar de Nochevieja por este país, Chile nos parece totalmente diferente. Ya sólo la moneda nos desconcierta, aquí en Chile se habla de 1000 en 1000 y la primera impresión es de que todo es carísimo. Sin embargo, aunque Chile sea uno de los países más caros de Suramérica pronto nos acostumbramos al cambio.


Tramites de aduana para entrar a Chile
Entramos por Osorno. Esta ciudad es la primera ciudad que nos encontramos al cruzar la frontera desde Bariloche, Argentina. Osorno está en la zona de los Lagos Chilenos por lo que los paisajes hasta llegar aquí son espectaculares. La verdad es que Osorno nos pareció caótica. Quizá al ser la primera visita a Chile todo es diferente, el acento (los chilenos hablan un poco como los andaluces y los canarios juntos, así que os podéis imaginar!!), las facciones, las comidas, las calles,… Sin embargo pronto nos dimos cuenta de los que nos gustaba Chile.


Por las calles de Osorno
Chile está atravesado por la Panamericana. Esta carretera circula de una punta a otra del país, por lo que es muy sencillo orientarse. Es una carretera en perfectas condiciones con dos carriles para cada sentido, por lo que los trayectos por Chile fueron agradables y nada peligrosos. Además los chilenos son gente encantadora, que les encanta la fiesta y la broma, así que hicimos grandes amistades en Chile. La gente es amable y se para a conversar, a ofrecerte su ayuda e incluso a acompañarte a los sitios o a llevarte. Incluso muchos comentan que nos les gustan los españoles!! Como puede ser? Quizá se justifica cuando te explican que medio Chile está controlada por españoles, ya que hay grandes multinacionales establecidas allí (como Telefónica, Sacyr, Dragados, Abertis,…) que aprietan cada día más al chileno. Pero nosotros les hicimos ver lo bueno que somos los otros españoles!!





Puerto de Valdivia
De Osorno decidimos partir a Valdivia. Nos habían comentado que Valdivia era bonita, pero la verdad es que cuando llegamos nos encantó su rio que bordea la ciudad. Allí nos alojamos en una casa de familia. En Chile se estila mucho las cabañas particulares y que en las casas familiares (legales o no) te ofrezcan una habitación para dormir (12.000CLP= 20€). Nosotros estuvimos con una familia que tenía un hijo de unos 13 años enamorado de Europa y que arrendaban una habitación a parejas como nosotros.


En Valdivia hicimos una excursión a los alrededores, a una playa de arena negra llamada Niebla donde los locales suelen ir. No sabemos cómo la gente se mete en el agua porque estaba helada (pero increíblemente fría!!). Aunque tenemos que decir que lo mejor fue su mercado. Nos fascinan los mercados y el de Valdivia es increíble, no solo por el pescado, la fruta y los productos extraños que no habíamos visto nunca, sino porque alrededor hay como una veintena de leones marinos esperando que los pescaderos les lancen las cabezas de los pescados. Alucinante!! Incluso les había las puertas para que pasaran a donde estábamos la gente y poder darles de comer. Imaginaros a un bicho de 400kg con una cabeza más grande medio cuerpo nuestro esperando a que le diéramos de comer. Una experiencia inolvidable!






Dejamos Valdivia y llegamos a Villarrica. Realmente la gente se dirige a Pucón ya que es la parte más turística, pero nosotros por economía y por el consejo de la gente nos paramos en Villarrica. Villarrica tiene un lago precioso donde la gente se baña y disfruta de la vista del volcán de fondo. Hacía calor, así que plantamos la tienda en un camping justo en la costanera (al lado del lago) y nos dirigimos a investigar Pucón, Villarrica y los alrededores.

Fuimos de excursión a Pucón y podemos decir que es lo más turístico que hemos visto en Chile. Es una gran tienda de suvenir para extranjeros donde si un menú normal te cuesta 2000CLP allí te cuesta 8000CLP. Mucha gente se acerca a Pucón para hacer el ascenso al volcán Villarrica ya que este pueblo queda a las faldas del volcán, pero lo más importante es poder costeárselo ya que Chile no es barato. Aprovechamos y desde Pucón fuimos a Caburga. No conocíamos este rincón, pero al parecer mucha gente iba a bañarse. Cuando llegamos a Caburga nos dimos cuenta de que era un lugar encantador y tranquilo donde las familias chilenas van a bañarse. Es un lago (creo que artificial) tranquilo donde nos sorprendió que aun siendo sábado no estuviera abarrotado. Nos gustó!! La pena es que no llevábamos el bañador.
Volcán Villarrica visto desde Pucón
Hablando con vendedores en Pucón



Volcán y Sara en Caburga

Sin embargo, seguimos diciendo que nos gusta más Villarrica, aunque muchos digan que es una ciudad de paso hacia Pucón, es más barata, con mejo r costanera y más tranquila que su vecina turística.

Ami y Sara en Villarrica con el volcán de fondo
Seguimos subiendo por Chile. Así que nuestro próximo destino es Chile Central.

miércoles, 2 de febrero de 2011

Patagonia Chilena: Torres del Paine

Dicen que es una de las maravillas de Chile y que pocos chilenos la conocen. Estamos en el Parque Nacional de Torres de Paine. Habiamos salido de Ushuaia y después de cruzar el estrecho de Magallanes, por temas de repartimiento de Tierras llegamos a Punta Arenas y más tarde a Puerto Natales, puerta del parque natural.

La verdad es que en Puerto Natales se respira el turismo al parque Natural. Hay tiendas de material de montaña, supermercados llenos de gente comprando provisiones para la gran aventura de 4 dias y como no, hostels con información, material y guarda-equipajes para que unos se pueda ir y regresar sin problemas. También hay un poste donde indica la distancia a ciertos países y ciudades. ( Lo gracioso es que aparece Terrassa, nuestra ciudad natal).

                                                              Fotos: El poste con la distancia hasta Terrassa.

Llegamos a Puerto Natales por la tarde y con las dudas de si ir o no a Torres del Paine. Habiamos viajado con Danel, el vasco, y el si que iba a ir, así que aunque con gran dolor de barriga (porque el parque es carísimo) en dos horas preparamos el material, rehicimos las maletas y compramos provisiones. Nos esperaban cuatro días de aventura por senderos de montaña.



De buena mañana partimos hacia el parque con un autobús dedicado a ello (12.000CLP persona) y allí por casualidades de la vida Danel se encontró con Jon (el otro vasco con el que estuvimos durante semanas, y más tarde volveríamos a encontrarnos por Argentina, Chile, ….). Así que los cuatro entramos al parque (15.000CLP por persona) y adelante. La ruta más conocida del parque es la W que se hace en cuatro días, aunque hay más rutas como la O que es para gente más experta. Hay campamentos libres para descansar y montar la tienda, aunque los mejore situados son los de pago.

El primer día después de cruzar en lancha por un lago (obligatorio casi) ,llegamos al primer punto de nuestro trekking. Este camino nos llevaría después de hora y media a un mirador donde vimos un glaciar impresionante que desprendía un viento muy frio. Para llegar al segundo punto debíamos volver y emprender otro sendero muy bonito para llegar a un campamento y poder hacer noche, (campamento italiano).Este sendero lo hicimos cargado con las mochilas ya que en el primero pudimos dejarlas en un guardamochilas.


     
Fotos: Danel y el glaciar Grey de fondo y a la derecha, Ami por un sendero.


Fotos: Sendero y puente confortable y seguro.




Foto: campamento italiano.

Despues de pasar la noche en campamento italiano, nuestra intención era la de ascender la mañana
siguiente, pero el tiempo nos lo impidió. Empezó a llover y los cuatro decidimos pasar el día allí para ver si al día siguiente la cosa cambiaba. La comida no faltó pero nos dejamos la sal y todo el arroz y pasta que comíamos los cuatro estaban algo sosos. Tuvimos mucho cachondeo con la comida pero comimos…

Al día siguiente la lluvia no daba tregua, así que nosotros decidimos emprender otro camino hacia la otra cara de la montaña para poder llegar a otro punto, el campamento chileno. Danel y Jon como buenos vascos se quedaron y subieron con la suerte que la lluvia desapareció y pudieron ver los cuernos de la cima desde otra perspectiva. Hay que decir que la finalidad del total del trekking es ver los ‘’los cuernos del Paine’’ que es la cima de la montaña.

  

 

Después de siete horas de caminata por senderos espectaculares llegamos a campamento Chileno e hicimos noche allí. (Aquí si que tuvimos que pagar) Hay que decir que era el tercer día y el primero en donde pudimos ducharnos, no nos da apuro decirlo,jejeje!!! La caminata fue algo agotadora (unos veinte Km, con peso y casi todo cuesta arriba) pero íbamos bien cargados de frutos secos y chocolate para pillar fuerzas.


Al cuarto día, a las siete de la mañana escuchamos una voz que decía nuestros nombres, eran Danel y Jon! que acababan de llegar, nos hizo muchísima ilusión, ya que habían pasado noche en otro punto del camino. Nos reencontramos y después de desayunar nos dispusimos a hacer el ascenso final hasta el mirador desde donde se pueden apreciar los cuernos del Paine. Este camino fue bastante duro ya que era una subida muy pronunciada a lo largo de casi dos horas.

Al llegar al mirador todo el esfuerzo y cansancio que habíamos acumulado se nos olvidó. La vista era espectacular y había valido mucho la pena. Después de quedarnos los cuatro un buen rato disfrutando de las vistas y haciendo fotos, quedaba bajar, desmontar tienda y llegar hasta la salida. Fueron un total de unos 50Km.







Fotos: En la cima!! De fondo las Torres del Paine.

Fue una de esas experiencias que jamás olvidaremos por todo lo espectacular del paisaje. La naturaleza nos dio la oportunidad de disfrutar de ella en profundidad y como no, con la suerte de poderla compartir con los vascos.

La victoria!! Danel, Jon, Sara y Ami celebrando el final de la aventura por el PN Torres del Paine

Próximo destino: El centro de Chile.