jueves, 1 de septiembre de 2011

Singapur: Un Asia diferente.

Dejamos China y desde Hong Kong hemos volado a Singapur con un vuelo de nuestro billete de vuelta al mundo. ¿Pero esto es Asia? Esta es la pregunta que nos hacemos cuando pisamos el aeropuerto de Singapur y más aún cuando veamos cómo es la ciudad. El aeropuerto de Singapur es uno de los más modernos del mundo y junto al de Hong Kong ofrece unos servicios excelentes. Tiene tres terminales conectadas con tren de alta velocidad gratis y la verdad es que dispone de sistemas de ventilación de última generación e incluso piscina interior, como nos enteraríamos mas tarde. Tanto es así que el aeropuerto de Singapur supone un punto de conexión imprescindible para casi todos los destinos asiáticos. Nosotros bien lo sabemos porque visitamos tres veces Singapur y este aeropuerto, de la misma forma que dormimos cómodamente dos veces por temas de horarios y conexiones con vuelos. Es una realidad que resulte mucho más económico y sencillo volar a Singapur y enlazar con destinos de Asia que viajar entre dos puntos que pueden resultar a priori más cercanos. Así que si alguien viaja por Asia que tenga en cuenta esta opción, puede ser la elección más económica.

Sin más llegamos a Singapur. Es 15 de junio de 2011 y habíamos contactado con Rosty. Rosty es una chica de Filipinas que vive en el centro de Singapur y en un contacto de última hora mediante la página que utilizamos para alojarnos gracias a la buena voluntad de la gente nos abrió su casa. Desde el aeropuerto tomamos el metro de uso fácil, cómodo y económico y nos dirigimos hacia su apartamento ubicado en el barrio céntrico de Bugis.

Paseando con Rosty
Rosty vino a buscarnos a la parada y nos pareció encantadora nada más verla. Simpática y agradable nos abrió su casa que comparte con tres personas más. Así que estuvimos allí tres días disfrutando de este paréntesis. Nos reímos mucho, nos ayudó en todo, jugamos a cartas y disfrutamos de su compañía robada tanto como pudimos comiendo en el gran mercado de comida justo debajo de su casa.
Singapur nos pareció y nos parece una ciudad totalmente diferente a lo que Asia es para nuestros ojos. Es totalmente ordenada, correcta y limpia. En una ciudad donde está prohibido comer chicle (de hecho ni se vende y es ilegal entrarlo en el país) por un tema de limpieza y donde se aplican las multas a rajatabla por cruzar en rojo, por injerir alimentos en el metro,…. Es una ciudad económicamente fuerte, con grandes edificios altos pero manteniendo sus zonas verdes. Avenidas con grandes centros comerciales con tecnología de última generación y con una fuerte presencia comercial y empresarial. Singapur supone sin duda una ciudad de negocios que mezcla el encanto de Asia pero los servicios de una gran ciudad como puede ser Barcelona.


Singapur no es del todo caro. A excepción del alojamiento que es extremadamente caro en comparación con otras cosas (del orden de 30-35 dólares singapurenses por persona en una cama en un dormitorio compartido de un hostel= 17-20 €) la comida es bastante económica. De hecho no vale la pena comprar en los supermercados porque en la calle es más barato comer. Hay que decir, que quizá por la ubicación geográfica de Singapur, esta ciudad resulta una ciudad de contrastes y mezcla de razas. Paseando te encuentras la comunidad china que resulta importante en Singapur, si sigues avanzando te das de frente con Little India pero un poco más adelante está el barrio musulmán. Por lo que hay donde elegir. Es impresionante ver como la gente vive en armonía aún con culturas y religiones tan diferentes. Además las comunidades viven tal y como lo harían en su país, con sus tradiciones, sus tiendas, sus productos y su religión. Se puede ir a degustar un chicken masala con nans en Little India o irse a fumar tabaco en xixa al barrio musulmán.


Templo de Little India

Comedores
Por nuestra parte disfrutamos de esta fusión de culturas en un único lugar tanto como pudimos. Paseamos por las calles de Singapur teniendo la extraña sensación de que paseábamos por la Orchand road donde todo es lujoso, está llena de bancos, empresas y centros comerciales. Pero al día siguiente estábamos en Little India o Chinatown. Caminamos y caminamos pero sobretodo comimos. En Singapur existe la cultura de los comedores populares, y tenemos que decir que nos encantan. Los comedores populares se basan en pequeños locales todos bajo un mismo mercado en donde cada comensal elije lo que quiere comer, lo compra y se sienta en una de las mesas comunes a degustar su comida. No importa si yo he comprado la comida en un puesto donde venden fideos con salsa de coco al estilo filipino y mi acompañante como pollo con curry mientras bebe una bebida de soja que ha comprado en otro lugar. Esto es Singapur! Además es tanta la competencia que los platos suelen valer alrededor de 3$ y una bebida 0,8$ (1,7€ y 0,4€ respectivamente).
 También se puede salir a las afueras de Singapur y visitar reservas naturales. Quién diría que una gran parte de Singapur se mantiene intacta y es selva, ¿verdad? Pues así es, es el Parque natural Bukit Timah Summit . Poca gente sabe que un poco a las afueras, donde se puede llegar en transporte público gracias a la excelente red de autobuses y metros de la ciudad, se encuentra una gran extensión de terreno de plena selva virgen. Nada más llegar los monos te dan la bienvenida y ya te quedas impresionado de la gran colonia de primates que hay en este entorno natural. Caminamos por sendas de trekking con grandes árboles tropicales y la correspondiente humedad tropical. Hicimos la mayoría de los senderos y después de más de dos horas de caminatas quedamos satisfechos de ver esta otra cara de Singapur.
Fotos: Parque natural
Por lo que respecta a la ciudad es modernidad absoluta. Hace recientemente poco se ha acabado el hotel más moderno de la ciudad el cual tiene una estructura peculiar: sobre tres pilares se extiende un brazo horizontal que al parecer es el restaurante del hotel. Impresionante a la vista desde el León medio hibrido con pez que representa el símbolo de la ciudad. Esta figura está a los pies de uno de los hotel más carismáticos y clásicos de Singapur: el Hotel Raffles (de hecho el nombre de Raffles está por toda la ciudad como bien nos había avisado nuestro amigo Jose del petit comité!). Sin embargo desde aquí también se aprecia una gran noria que también es significativa de esta ciudad.  Si se sigue avanzando se encuentra uno de los muelles lleno de bares y restaurantes que por la noche se llena de luces y le da un toque “chic” a la ciudad. En definitiva quien viaje a Singapur no tiene porque aburrirse.


Fotos: Monumento simbolo de la ciudad y hotel de fondo. Paseando por Singapur

Volveríamos dos veces más a Singapur y por temas de comodidad y de incompatibilidad de agenda tendríamos que compartir nuestra estancia entre el aeropuerto y uno de los hostels que encontramos por internet con precios “oferta” (15$ por persona  en vez de los 24$ habituales por una calidad excelente = 8,5€ y 14€ respectivamente). Y para los que piensen que dormir en el aeropuerto no es seguro no hay que preocuparse ya que el aeropuerto Changi de Singapur es tranquilo, seguro y no somos los únicos.

Fotos: en el hostel y dejando la ciudad en el metro

De esta forma, nos despedíamos de Singapur. Después de visitarla en tres ocasiones fue un momento especial cuando nos paramos la última noche en un punto de la ciudad muy loco ya que estábamos pasando por delante de una iglesia cristiana mientras escuchábamos cantos musulmanes procedentes de la gran mezquita ubicada a nuestra izquierda pero a nuestra derecha estaban haciendo una fiesta china con marionetas tradicionales. Y todo esto mientras nos dirigíamos a Little India para ir a nuestro hostel. Este podría ser el resumen de Singapur. Una mezcla de todo lo que el viajero quiere ver. Una pequeña muestra de lo que se va a encontrar en el periplo por Asia. Una ciudad diferente y de relajación dentro de la locura asiática que más tarde nos quedaba por vivir.
Nos vemos en la próxima entrada: Indonesia.

La superfurgoneta en Singapur

2 comentarios:

  1. Muy bien chicos....veo que seguis con los deberes...aupa ese paseo por el mundo. Me ha hecho mucha gracia leer vuestros comentarios sobre Singapore y Hong Kong (dos ciudades que conocemos bien) y que compartimos al 100%. Igual que con vuestra experiencia China...upsssss besitos nenes. Maria Luz

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  2. Que bonitos recuerdos me habéis hecho tener, preciosa ciudad que vale muchísimo la pena visitar. Y como vosotros decís, el aeropuerto es simplemente espec..tacular. Dela piscina doy fe, puedes ver despegar los aviones mientras te das un bañito.

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